Como respuesta a la “acuciante” situación que aseguran atravesar como sector, los y las médicas cardiólogas intervencionistas de todo el país resolvieron una medida de fuerza que dejará sin efecto cualquier práctica programada de colocación de stents o angioplastia por 48 horas.
De este modo, excepto en las guardias -que se garantizarán en todas las clínicas y sanatorios para prácticas de urgencia- tanto el miércoles como el jueves no se realizarán intervenciones para denunciar los “honorarios bajos y falta de insumos”.
En un comunicado que está firmado por las autoridades del Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas (CACI) los profesionales advierten que la medida no tiene otro sentido más que “llamar la atención sobre la gravedad de la situación”. “Los cardiólogos instan al Gobierno nacional a intervenir urgentemente convocando al diálogo para solucionar este conflicto”, suplicaron, no sin recordar que la institución declaró hace tres meses “el estado de emergencia” de la especialidad y calificó la situación como una “tormenta perfecta”.
Alfredo Bravo, vicepresidente del CACI, detalló en diálogo con Infobae que “la medida se había pautado para el 13 y 14, pero motivó el cambio de la fecha que estábamos negociando con diferentes financiadores y al no tener respuesta seguimos adelante con este paro simbólico para que la gente tome conciencia de la situación crítica que estamos viviendo en la salud específicamente en el área cardiovascular”.