Tras la detención de Gabriel Carrizo en el marco de la investigación del atentado a Cristina Kirchner, su madre rompió el silencio.
«No puedo creer todo lo que está pasando. Él empezó a hacer copos de nieve hace muchos años, vendía en Morón, pero decidió irse a Capital para hacer más plata y conoció a este gente en un evento laboral. Ahí ellos le pidieron trabajo», sostuvo Stella Maris.
Y agregó: «Me dijo que no podía creer que estaba involucrado en esta situación. Me aseguró que los conocía, pero que solo les había dado trabajo. Él no sabía nada del ataque, se enteró después. Le creyó a Brenda Uliarte»
Sobre los estados de WhatsApp contra Alberto Fernández, explicó: «Le expresé que el mensaje era desubicado, pero me dijo que él quería decir como que el Presidente tenía que cuidarse por lo que le pasó a Cristina».
«No creo que mi hijo lo haya hecho, pero si tiene que pagar lo que tiene que pagar, que pague. Si no es así, que lo liberen y lo dejen tranquilo«, concluyó