Tras algunas semanas de protagonismo en la escena pública, por haber visitado a represores en la cárcel y por haber denunciado a un colega del mismo espacio por violencia de género, el Gobierno habría resuelto echar a Lourdes Arrieta del bloque de Diputados de La Libertad Avanza.
La decisión de apartarla ya estaría tomada, según adelantado fuentes oficiales a DIB, que indicaron que fue la secretaria general Karina Milei, que en algún momento impulsó a la diputada como cara visible de su armado político en Mendoza, quien habría terminado de decidir la suerte de la legisladora.
La situación de Arrieta en el bloque se complicó tras la viralización de los audios en los que estalla en gritos contra sus colegas de bloque en una reunión en la que le habían cuestionado que apuntara contra el presidente de Diputados, Martín Menem, como una autoridad que estaba al tanto de la visita a los genocidas.
Ese escándalo incluyó una denuncia penal -que fue desestimada- por violencia de género contra uno de los diputados de LLA y una presentación ante la oficina que se ocupa de ese tipo de delitos en la Corte Suprema. De esa manera, Arrieta llevó la controversia más allá de los límites de su bloque parlamentario, lo que terminó de complicar su situación.
El martes, Menem elevará una nota al secretario parlamentario del bloque, después de una reunión de la bancada, con la comunicación de la decisión final sobre Arieta, que podría contener una lista con la nueva conformación de la bancada, sin la mendocina. Desde entonces, Arrieta debería crear su propio monobloque o sumarse a otro, condiciones indispensables para seguir ejerciendo su rol como diputada.
Con esta expulsión, el bloque libertario, que empezó con tan sólo 38 diputados en diciembre, quedaría aún más magro: es que ya lo abandonaron Oscar Zago, quien arrastró en su ruptura la cordobesa María Cecilia Ibáñez y el bonaerense Eduardo Falcone.